Un espacio de conocimiento, metodología y su forma de implementarla, a diferentes tipos de empresas que sienten que su gestión de negocios, de equipos, liderazgo, rendimiento y de negociación es empírica y tiene grandes oportunidades de mejora
Tomar la decisión de contratar a alguien para una conferencia es un reto enorme. Es uno de esos momentos en que los ojos de la organización están encima de las personas que toman la decisión de hacerlo.
Son muchos los casos de conferencias llenas de motivación, donde hay mucha energía pero que con el paso de los días se va disipando, va quedando como una linda experiencia que genera recordación en las personas pero de la cuál se implementa muy poco.
Los conferencistas tienden a tener conferencias ya estructuradas que no se logran ajustar a las necesidades especificas de la empresa que los esta contratando, las recetas genéricas no les sirven a todos por igual.
La clave esta en entender la necesidad especifica de la empresa, elegir cuales son esos (máximo) 3 puntos específicos de conocimiento que queremos que se lleve la audiencia y construir la conferencia en torno a esto. Es lo que garantiza la implementación.
“A los clientes le importa muy poco quienes somos, que hacemos o qué experiencia tenemos, lo que realmente le importa es lo que podemos hacer por ellos.”